sábado, 30 de enero de 2010

VISITA CULTURAL-PANTEÓN Y MUSEO NAVAL


Se ha realizado como teníamos programadas las visitas en la Isla de León, San Fernando, al Panteón de Marinos Ilustres y al Museo Naval, enclavados en el edificio Rey Carlos III de la histórica Población Militar y Naval de San Carlos. El edificio construido en estilo neoclásico, hoy edificio principal de la Escuela de Suboficiales de la Armada.
Un grupo de socios casi medio centenar, asistimos el pasado viernes día 29 de enero a esta visita que tras la solicitud a los Mandos de la Armada, nos fue concedida gentilmente.
El traslado lo hicimos los residentes en Cádiz en el tren de cercanías, pues era la manera más cómoda de llegar hasta la ubicación, dada la poca distancia existente entre la estación de Renfe y el Poblado Militar.
Fuimos asistidos a la llegada por un guía civil, cuyo nombre es Sergio que nos hizo muy amena dicha visita dado los grandes conocimientos que posee de este histórico lugar, el cual nos fue explicando todo los pormenores de tan emblemático edificio.
Es un edificio de estilo neoclásico, construido en el siglo XVIII y que está ubicado dentro del recinto de la Población militar de San Carlos, en San Fernando (Cádiz), el que descasan los restos mortales de numerosos marinos españoles.
El un principio concebida como Iglesia de la Purísima Concepción, las obras de construcción comenzaron a finales del siglo XVIII por orden de Carlos III, y, por problemas económicos y políticos, no se finalizaron hasta 1959 (mediados del siglo XX).
El Panteón consta de tres cuerpos unidos entre sí por otros dos de forma circular y la iglesia se compone de dos naves laterales cubiertas con un crucero central descubierto. Partiendo de la cúpula, cae al centro de la nave central una lámpara votiva en plata y cobre de quinientos kilos de peso, esmaltada con los escudos de armas de los Almirantes.
Desde entonces y hasta ahora el edificio ha dado cobijo a los restos mortales de aquellos que llevaros por su alto concepto del honor o movidos por su abnegado sentido del deber, alcanzaron el reconocimiento y la gloria, ya fuera dando ejemplo de bizarría en el campo de batalla, cultivando las letras o desarrollando las ciencias. El Panteón de Marinos Ilustres forma parte de la Escuela de Suboficiales de la Armada y se ha convertido en lugar de cita inexcusable ya que se encuentran entre sus muros retazos de la historia de España.
MUSEO NAVAL
Una vez finalizada la visita del Panteón, pasamos a otro edificio contiguo donde se ubica el Museo Naval en el cual iniciamos la visita auxiliados por una guía de turismo cedida por la Concejalía de Turismo de la ciudad y en donde comenzamos por la planta baja (sala de arqueología submarina) y fuimos subiendo hacia dos plantas más, hasta recorrer las 21 salas de que consta.
A destacar la "rotonda", patio circular rematado en montera de cristales sostenida por ocho columnas jónicas, y al que se accede por dos escaleras en forma de espiral y todo decorado con azulejos de Delft (Holanda) del siglo XVIIII.
El museo como sabíamos está orientado preferentemente a temas navales.
Los fondos proceden en gran parte de las dependencias de la Zona, del Museo Naval de Madrid y colecciones particulares. También, de la valiosa colección, depositada en el Museo, de la "Asociación de Amigos de los Museos de Marina" vinculada al mismo, donde en esa mañana pudimos saludar a varios socios de nuestra Casa que pertenecen a dicha asociación y se encontraban en el recinto.
De sus fondos podrían destacarse como resumen:
1.- Valiosos modelos de barcos de distintas épocas y tamaños, completa colección de barcos en madera de Guayacán, instrumentos náuticos, láminas, grabados, maquetas uniformes y condecoraciones de gran valor histórico y artístico.
2.- Armas de diversas épocas, construcción naval, objetos de la Escuela de Suboficiales, Arsenal de La Carraca, Juan Sebastián de Elcano; metopas, banderas, fotografías, objetos religiosos e imágenes sagradas, cartografía, etc.
Todo enfocado a la exaltación de las glorias marineras y la salvaguardia de cuantos elementos contribuyen al estudio e investigación de la Armada.
Tras dos otras y media en que duraron las dos visitas y agradecer las atenciones recibidas, el grupo de socios asistente, volvimos nuevamente a la Estación de San Fernando para volver a Cádiz los que en ella residen, despidiéndonos de los que lo hacen en la misma ciudad y otros venidos desde Dos hermanas (Sevilla).
La primera actividad cultural extra-asociativa de este año, concluida con la satisfacción de haber visitado algo que teníamos muy cercano y que la mayoría del grupo no ,quedando todos los asistentes muy satisfechos por haberla realizado.

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